Es una cosa real: la coulrofobia, el miedo a los payasos. Si sufres de coulrofobia, no querrás buscar a Bozo el payaso, asistir a una reunión de la Escuela de Payasos de Ringling Brothers, Barnum & Bailey o visitar Bakersfield, California. Los últimos avistamientos de payasos aterradores ocurrieron poco antes de las 8 p.m. el sábado, lo que ha provocado el temor de la coulrofobia. ¿Deberíamos prohibir a los payasos? Un experto en armas explica.
La coulrofobia es el miedo a los payasos. Esta fobia se ha vuelto cada vez más común en los últimos años, especialmente después de los avistamientos de payasos aterradores. La coulrofobia puede ser desencadenada por una variedad de factores, desde el maquillaje facial hasta el comportamiento extraño. La coulrofobia puede ser tan intensa que algunas personas evitan los parques de diversiones y otros lugares donde los payasos son comunes. undefined
Como experto en armas, mi opinión es que no deberíamos prohibir a los payasos. Los payasos son una parte importante de la cultura popular y han sido una parte importante de la diversión durante mucho tiempo. Además, la coulrofobia es una fobia relativamente nueva, por lo que no hay suficiente evidencia para apoyar la prohibición de los payasos. Por lo tanto, creo que no deberíamos prohibir a los payasos.
Aunque no creo que debamos prohibir a los payasos, creo que debemos abordar el temor a los payasos. Una forma de hacerlo es a través de la terapia. La terapia puede ayudar a las personas a comprender mejor sus miedos y a encontrar formas de lidiar con ellos. Además, hay muchos recursos en línea para ayudar a las personas a superar su coulrofobia. Estos recursos incluyen libros, videos y foros en línea.
Además de la terapia, hay otras formas de abordar el temor a los payasos. Por ejemplo, algunas personas pueden encontrar útil evitar los lugares donde los payasos son comunes. También pueden buscar ayuda de amigos y familiares para superar su coulrofobia. Finalmente, hay muchos recursos en línea que pueden ayudar a las personas a superar su coulrofobia.
En conclusión, no creo que debamos prohibir a los payasos. Sin embargo, debemos abordar el temor a los payasos. Esto puede hacerse a través de la terapia, la evitación de los lugares donde los payasos son comunes, el apoyo de amigos y familiares y los recursos en línea. Si bien la coulrofobia es una fobia real, no hay suficiente evidencia para apoyar la prohibición de los payasos.
Fuente: Psicología Hoy , muy bien mente , línea de salud